miércoles, 18 de enero de 2012

Qué cosa más bonita un zorro volador

Sobre el muerciélago circulan a cientos mitos y leyendas por lo general injustos. Se relaciona al animal con Draculea, Blad, el mítico empalador transivlano cuya crueldad ha hecho volar la imaginación de los apologistas que lo evocaban transfigurado en muriciélago hematófogo, por el gesto en apariencia mefistofélico del roedor. El murciélago, pese a contener atributos terroríficos, tales como dientes puntiagudos, orejillas parabólicas y ojos mínimos, es completamente inocuo para el ser humano.
De todas las espcies de murciélago que existen, la que con mayor presencia ha sucumbido a los rigores de la industria cinematográfica y literaria es la conocida como "Zorro volador", en un principio zorro volador de Linvingston, ya que fue el aventurero la primera persona en catalogarla.  El zorro volador es el murciélago de mayor tamaño conocido, y vive en Filipinas y en algunas zonas del centro de África. Es célebre su efigie amplia si vuela y perfila su característica sombra con forma de capa, ancho de alas y escueto de talle, al salir de las cuevas cuando anochece. 




Pese a que las especies comunes de murciélagos, a los que se conoce como micromurciélagos en comparación con los gigantes, se extiende a lo largo y ancho del mundo, la presencia de zorros voladores o megamurciélagos sólo ha sido constatada en ciertas zonas de África, Asia y Oceanía. Vive amenazado porque su carne es muy apreciada en la población local, aunque el animal es absolutamente inofensivo para el ser humano. El zorro volador sólo come fruta y además genera una serie de beneficios asociados a su dieta, por lo que su extinción mermaría los ecosistemas en que habita. Sus deposiciones, que se encuentran a toneladas en las cuevas filipinas donde viven en multitud, son uno de los fertilizantes naturales más populares. También los zorros voladores africanos codyuvan de forma ineludible en la propagación de semillas de los frutos que consumen, pilar ensencial en la reproducción vegetal del territorio.


Además de inofensivos, los zorros voladores son beneficiosos para el ser humano, por lo que su caza masiva podría acarrear consecuencias terribles. Hay estudios que incluso hallan un parentesco inverosímil entre nosotros y los zorros voladores, como el llevado a cabo por Jack Pettigrew, quien propuso en 1986 una teoría que sugiere que los megamurciélagos evolutivamente forman un grupo hermano con los primates. Pettigrew descubrió que las conexiones entre la retina y el colículo superior del mesencéfalo de Pteropus estaban organizados de la misma manera que en los primates, siendo diferentes en el resto de mamíferos.
Estudios posteriores en 1989 vislumbraron nuevas características anatómicas comunes. Pettigrew sugiere que los megamurciélagos, colugos y primates son descendientes de un mismo grupo de mamíferos arbóreos tempranos, y que la capacidad de volar es la forma de adaptación a la vida en las alturas.
Pese a que esta teoría ha sufrido severas críticas, nunca hay que olvidar la inquebrantable conexión que nos asocia a todos los seres vivos y que procura que el sostenimiento de la vida en el planeta solo pueda preservarse viviendo de forma armónica y respetuosa.

4 comentarios:

  1. Yo me niego a pensar que los bicharracos esos tan feos y asquerosos tienen algo que ver con nosotros. Y aunque soy consciente de lo inofensivo de estos animales siempre seré reticente a estar cerca de alguno de ellos, no me vaya a chupar la sangre :P. El murciélago, por lo que a mi respecta, solo sirve para ser objeto de adivinanza. ¿Cuál es el único animal que contiene la cinco vocales?

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  2. Por cierto, interesantísimo este nuevo blog tuyo sobre animales.

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  3. Ya el murciélago ha dejado de ser objeto de adivinanza...xD

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  4. una vez mas los humanos acabando con la especie que triste y falta de cultura.. que se puede esperar en un mundo así donde vivimos :$..

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